Tito Pérez Quiroz
EL PROFESOR CÉLIS
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Prof. ANTONIO ABAD CELIS PADILLA, con eldeber cumplido y tranquilidad del justo descanso.
Mi visita a Cajamarca tenía como objetivo, después de visitar a mi madre Victoria, conversar con don Antonio Célis Padilla, ex-profesor y director del Colegio Nacional Mixto San Miguel durante mi tránsito por aquel centro de estudios. Cajamarca estuvo gozando, para mi sorpresa, de un intenso sol invernal.
Con mi sobrino Daniel, hijo de mi hermano Elmer, el popular “Machito”, busqué al profesor Célis en la dirección proporcionada por el profesor Juan Paredes. Y lo encontré bien, calmado, lúcido, y con una memoria impresionante para narrar los hechos de su ejercicio profesional en el colegio sanmiguelino. Obviamente está añoso, con 78 años encima, y siempre trabajando en su casa del Pasaje Esperanza de la ciudad del inca. Con amabilidad me invitó a pasar...
Buenos días don Antonio Célis; soy Tito Pérez, ex-alumno del Colegio Nacional San Miguel durante su gestión como profesor.
Hola, cómo estás. Eres hijo de don Humberto Pérez, ¿verdad?
Así es, profesor.
Y don Humberto, ¿sigue moviendo los dedos de las manos?
Sigue moviéndolos, sigue hasta hoy.
Él me cortaba el cabello.
Don Antonio, ¿usted es de Cajamarca?
No, no… yo soy de la provincia de Santa Cruz, de un conocido pueblo llamado Pulán.
Y, ¿cuándo llegó usted al Colegio Nacional San Miguel?
Llegué al Colegio Nacional Mixto San Miguel en 1965 como profesor de Historia y luego, también, de Geografía.
Y, ¿cuándo asumió la dirección del plantel?
En 1973, primero como encargado, luego como director nombrado.
¿Hasta cuándo permaneció como director del colegio?
Hasta 1979. Luego fui transferido a otro plantel.
Don Antonio, ¿cuál fue la mejor experiencia que vivió como director del Colegio Nacional Mixto San Miguel?
Tuve varias experiencias buenas. Una de ellas tuvo que ver con la premiación del cuento escrito por un alumno del colegio en un evento literario internacional.
¿Y la peor experiencia?
La muerte del alumno Carlos Reyes Quiroz, “Calín”, después de haber participado como arquero del equipo de su salón, en una excursión realizada a San Pablo. Carlos tuvo un golpe serio durante el partido, y regresó, caminando, a San Miguel. Pero en el camino se sintió mal, y en la ciudad falleció después de una semana. Fue un evento que me causó mucha pena.
Disculpe la pregunta, don Antonio, ¿usted se molestaba cuando le decían “Shuto”?
Dependía de cómo lo decían. Unos lo decían de manera amical, bromista, y no me molestaba; otros usaban el término en forma de agravio, de manera peyorativa, entonces sí me molestaba.
Don Antonio Célis aprovechó la oportunidad para precisar que la palabra correcta era “Chuto” y no “Shuto”, y que el significado de este cajamarquinismo era “torpe, apegado a sus costumbres”.
De mi parte consideré oportuno inquirir sobre la famosa huelga realizada, en 1968, en el Colegio San Miguel. El ex-profesor y ex-director del colegio dijo, sin ambages, que aquella huelga había tenido un notorio tinte político, y que la razón de la huelga se sustentaba en un hecho incongruente.
Sucede que, en aquellos tiempos, había en el colegio tres profesores, queridos por el alumnado, pero que eran de tercera, es decir, intitulados. Y por disposición de la autoridad educativa se dispuso relevar, a los profesores de tercera, por profesores titulados, alguno de los cuales era, inclusive, sanmiguelino.
Al final se impuso la decisión de la autoridad, tras ser intervenido el colegio por las fuerzas armadas llegadas de Cajamarca. La huelga duró una semana, y el suscrito participó en ella cuando cursaba el primer año de secundaria. Fue una participación de solidaridad pero sin entender los argumentos debido a mi escasa edad. Tenía, entonces, 11 años.
Recordé al profesor sus participaciones como recio defensa en los partidos de fulbito entre los equipos de profesores del colegio y de otras instituciones. Usted ponía la pierna fuerte y su seriedad era inalterable, le dije. Por supuesto, había que actuar de esa manera en defensa de nuestro colegio, acotó.
Después de despedirme de don Antonio fui, directamente, a la Plaza de Armas de Cajamarca. Ingresé a la Heladería Holanda y pedí un helado de capulí y poro-poro. Simplemente, espectacular. Y más si había sol en pleno invierno. Cambio climático le dicen.
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Tito Pérez Quiroz
Promoción 1972 Colegio Nacional Mixto San Miguelhttp://www.pallaques.com/
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N. de R. No cabe la menor duda que el Prof. ANTONIO ABAD CÉLIS PADILLA, será uno de los maestros y directores queridos y reconocidos por la comunidad sanmiguelina y en especial por quienes pasamos por las aulas del hoy Cincuentanario Colegio Nacional Mixto "San Miguel" de San Miguel de Cajamarca. Hombre destacado por su entrega fiel al trabajo, honestidad y amplia responsabilidad; desde su llegada se identificó plenamente con los anhelos de progreso de nuestro pueblo y contriuyó hasta el último día de su estancia.
Su presencia, magisterio y conducta ejemplar, lo guardamos y llevamos en lo más alto de nuestro ser, profunda admiración y gratitud.
Esta importante entrevista contribuye a valorar nuestra historia e identidad; asimismo, marcará un hito en la conciencia de cada uno de nosotros, quienes deberíamos ser siempre soldados viriles -como dice el Himno al Colegio- e ir tras nuestros maestros, personal administrativo y compañeros en búsqueda de sus enseñanzas y recuerdos; así seguir contribuyendo denodadamente al desarrollo de nuestra Alma Mater.
Su presencia, magisterio y conducta ejemplar, lo guardamos y llevamos en lo más alto de nuestro ser, profunda admiración y gratitud.
Esta importante entrevista contribuye a valorar nuestra historia e identidad; asimismo, marcará un hito en la conciencia de cada uno de nosotros, quienes deberíamos ser siempre soldados viriles -como dice el Himno al Colegio- e ir tras nuestros maestros, personal administrativo y compañeros en búsqueda de sus enseñanzas y recuerdos; así seguir contribuyendo denodadamente al desarrollo de nuestra Alma Mater.
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Casa donde vivió el Prof. Antonio Célis Padilla (de puertas y ventanas azules) en compañía de su familia: su esposa Prof. Rosa Vásquez e hijo, ubicada en el Jr. San Martín, hoy Pedro Novoa, quinta cuadra. La siguente casa pertenece a la Sra. Nieves Ramírez, quien se desempeñó ejemplarmente como Auxiliar de Educación de nuestro Colegio, área Normas Educativas, atendiendo a las damas. (Foto@rte Pisadiablo).
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